“Soy un seguidor de todos esos que buscan
el camino de la evolución, un Hombre.”
El hombre es Naturaleza desde su más
ínfima estructura y función. Se crea y se forma bajo las leyes naturales,
universales y espirituales que rigen todo nuestro entorno.
Por eso al concebir, percibir la creación
del mundo y comprender la formación de la Tierra desde todos los puntos de
vista estudiados, desde su cosmología, su cosmogonía, y su cosmovisión del
planeta, es también concebir y percibir cómo se formó el
hombre.
La Medicina de hoy día debe aceptar esto
como un hecho, en todos sus dominios de la ciencia y en todas sus grandes
instituciones. Puesto que ha sido “aparentemente” olvidada y poco aceptada esta
manera de concebir la medicina. Con el desarrollo de la ciencia y la técnica,
fundamentalmente dada a partir del siglo XX, con una visión mecanicista,
biologicista y reduccionista, se ha dado importancia a una medicina pragmática
basada en evidencia. Sería de gran interés para todos si este desarrollo de
ciencias médicas fuese acompañado de una visión integral y holística ya conocida
desde el origen de los tiempos.
Desde sus inicios la Medicina fue holística y así lo expresaban los
primeros médicos conocidos de la historia de la medicina. Entre muchos
otros.
Ejemplos como:
Hipócrates de Cos (en griego:
Ἱπποκράτης, Cos, c. 460 a. C. - Tesalia c. 370 a. C.),
médico de la Antigua Grecia planteaba que el enfoque terapéutico se basaba en el poder curativo de la naturaleza
(vis medicatrixnaturae, en latín)Según su doctrina, el cuerpo contiene de forma natural el
poder intrínseco de sanarse («physis») y cuidarse. La terapia hipocrática se concentraba
simplemente en facilitar este proceso
natural.
Hipócrates veía al hombre como un
todo, relacionado con su mundo mental y emocional, con sus 4 humores y la
naturaleza. E incluso vivenciaba como era de importante la influencia de los
astros en la salud del hombre. Encontramos dentro de sus frases célebres:
"Quien
practica la medicina sin beneficiarse con el movimiento de las estrellas y de
los planetas es un tonto".
"No
toques con hierro la parte del cuerpo gobernada por el signo por el cual esté
transitando la Luna".
TheophrastusPhillippusAureolusBombastus von Hohenheim,
conocido como“Paracelso” (nacido en Zúrich, en Teufelsbrücke, Einsiedeln, 17de
diciembre de 1493 -Salzburgo, 24 de septiembre de 1541), fue un alquimista, médico y astrólogo suizo.
Uno de los
principios de Paracelso fue:
«Únicamente un hombre
virtuoso puede ser buen médico»; teniendo la medicina, cuatro pilares:
la astronomía, ciencias naturales,
química y
el Amor.
“Un medicamento es lo que la naturaleza
predispone y el ser humano a través de una mirada trabajada lo termina, lo lleva
a cabo.”
Sin olvidar las medicinas de los
respetados chamanes de nuestra América y las grandes civilizaciones orientales y
asiáticas que tenían dado por hecho, lo que hoy nos referimos. La medicina
china, vasta y milenaria en todo su conocimientoy la medicina ayurvédica, ambos
consideradas unas de las medicinas orientales más antiguas, formadas desde antes
de Cristo.
La medicina como
ciencia, persigue mantener o recuperar la salud perdida o afectada de uno de sus
componentes; considerando que la salud es la calidad de la existencia del
hombre, determinada por su relación armónica con el medio social y natural que
le corresponde y no solo por la ausencia de la enfermedad.
La Organización Mundial de la
Salud (OMS), desarrolló el
concepto de salud: "La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y
social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades, y en armonía
con el medio ambiente".
El surgimiento de la medicina comenzó, conjuntamente, desde el
mismo instante en que el Hombre se creó en conciencia, se formó su núcleo de
conciencia, que se introdujo como ser independiente, despertando su esencia. Y
empieza a hacerse un cuestionamiento de cómo es su interacción con el mundo que
le rodea y se comporta según su libre albedrío. Es entonces que comienza el
proceso salud-enfermedad.
El hombre, como individuo y ente social,
en la Humanidad, en su interactuar constante en sociedad y con el medio
ambiente, se desarrolla y evoluciona como un ser espiritual, psíquico-emocional
y biológico. Y con su capacidad de elección, su libre albedrío, traza su propio
camino y, al mismo tiempo, configura su propio proceso de
salud-enfermedad.
"El médico y la
muerte”
Esta imagen, en mi opinión
personal, refleja exactamente la manifestación del proceso dinámico salud –
enfermedad. El hombre durante toda su existencia como ser espiritual, en su vida
física, se encuentra entre en un ambiente polarizado, digamos así, entre salud y
enfermedad. Ambiente que se manifiesta en todos los niveles, físico,
físico-químico, biológico-molecular, emocional, mental y espiritual. Siendo como
resultante el cuerpo físico, expresándose desde, simplemente sensaciones
físicas, síntomas, hasta la llegar a cualquier manifestación de enfermedad.
“Todo se basa en ese campo de energía
sabia que inunda permanente el Universo, que ha evolucionado hasta nuestras eras
hacia el Espíritu en el ser humano. El espíritu es una entidad energética que
almacena información, pues se encuentra en un proceso continuo de aprendizaje,
para alcanzar su sabiduría eterna, su evolución.”
Desde la antigüedad, el hombre desde su esfera inconsciente y
consciente, ha percibido su padecer como un proceso dinámico. Un proceso innato
que se encuentra en constante interacción entre el hombre y la naturaleza,
inmersos ambos en leyes de las cuales, el hombre ha podido percibir a través de
sus sentidos, como ser de la Humanidad, las leyes universales, naturales y
espirituales que rigen nuestra “morada”, nuestro planeta
Tierra.
Y en ese flujo de inspiraciones, análisis y procesos de información
mental, empieza a desarrollar un accionar hacia la búsqueda de encontrar
soluciones e intentar equilibrar el balance entre salud y
enfermedad.
El hombre al desarrollar su voluntad en busca de encontrar ese
equilibrio en el proceso de salud-enfermedad, se convierte en sanador, curador,
terapeuta, acompañante, compañero, hermano,…en “médico”.
Jesús dijo: “Procurad la verdad y la verdad os hará libres”...nos
indujo a creer que el libre albedrío humano aumenta a medida que el hombre se
liberta a sí mismo, de la esclavitud de las formas.
Podemos decir entonces que el Ser Humano, es un ser complejo donde
las energías transitan alimentando una conciencia cosmos-energética que se
manifiesta a través de un cuerpo biológico.
Es energía espiritual, un espíritu, una manifestación pura de
esencia divina de la naturaleza y del Universo, el cual transita entre planos de
diferentes estados de frecuencia vibratoria de acuerdo a su grado de evolución o
frecuencia vibratoria. Y a través de las sucesivas reencarnaciones va
evolucionando como espíritu y en cada cuerpo, que es materia física en el mundo
terrenal. Aprovechando siempre, una vez más, la oportunidad de aprender y
evoluciona en conciencia.
Cuando enfermamos nos hacemos conscientes
de cuánto hemos caminado y al llegar allí vivenciamos el milagro de la
naturaleza, nos hacemos conscientes de nosotros mismos y evolucionamos.
Junto con la medicina preventiva también
debemos desarrollar una medicina más abarcadora y holística que nos permita
percibir desde lo más hondo la esencia del paciente, su predisposición a la vida
que vive, y su grado de aceptación a ella.
No existe fuerza externa tan fuerte que
determine en nosotros nuestro propio camino que la que nosotros mismos podemos
determinar en nuestro andar, en nuestra Existencia, nuestra
Vida.
Aceptación, Perdón y
Amor.
Yainol
Blanco Corp (Cuba)
Doctor en
Medicina
Especialista en Medicina
General e Integral.
Especialista en Medicina
Tradicional y Natural.
Máster en Medicina
Bioenergética y Natural.
Diplomado en Cuidados
Intensivos del adulto
e-mail yainol@yahoo.es
cel. en Buenos Aires
11-2572-1904
No hay comentarios:
Publicar un comentario